Arroz caldoso con bogavante

Viva el bocadillo de tortilla de patata. En todas las ciudades, en todos los centros comerciales podemos encontrar los mismos locales: bares, restaurantes, pizzerías,... todos idénticos. Son las franquicias. En un principio parecía que sólo se centraban en la moda pero después dieron su salto a la restauración. Como "reacción" o contrapunto a esta tendencia han surgido otros establecimientos que quieren marcar diferencias, singularizarse en la carta, distinguirse por el diseño, esmerarse en el trato,,, así vemos nacer infinidad de locales pequeños que intentan abrirse camino.

"Cocina para novatos" como habréis podido adivinar no es precisamente un "fan" de los locales franquiciados, tampoco es un "hooligan" de los nuevos restaurantes porque ambos, cada uno a su manera, han contribuido a acabar con el bar de toda la vida. Hemos llegado a un punto en que es más fácil encontrar un local donde comerse un sushi, o una pizza para veganos o una hamburguesa de Kobe que un bocadillo de tortilla de patata con alioli. Y eso no puede ser. No, no, no y otra vez NO.

Son contados los locales dignos en los que comerse unas tapitas tradicionales y que ofrezcan los bocatas de siempre: Lomo y queso, sepia con salsa verde, longanizas con pimientos, tortilla francesa con queso y tomate, calamares con mayonesa,  blanco y negro, torraeta de anchoas... Todos los establecimientos deben tener cabida en una ciudad o pueblo, pero eso no debe llevar a aniquilar las otras opciones tradicionales, y sí señores, aunque al oirlo parezca extraño, el bocadillo de tortilla de patata debería tener la consideración de bien cultural. De la misma forma que se protege el patrimonio histórico-artístico, deberían adoptarse las medidas que fueran necesarias para que el bar de siempre, el de toda la vida, el que todos tenemos en mente no desaparezca. "Cocina para novatos" inicia este enero de 2016 la campaña: "Salvemos el bocadillo". En los próximos días os informaremos de las actividades sugeridas.

Donde tampoco tenemos ninguna duda es en afirmar que la receta que hoy os proponemos, fácil donde las haya, os dará un resultado extraordinario: Arroz caldoso con bogavante. 

Primero. Preparar el caldo de pescado. En esta ocasión no vamos a recurrir al tetra-brick del súper. Como hemos tenido que ir al mercado a comprar el bogavante hemos aprovechado y hemos cogido dos cabezas grandes de rape. Para el caldo se ponen en la olla el rape con las verduras, al fuego, esperar unos minutos, dejar enfriar, colar, y reservar. En este caso lo preparamos el día anterior.

Para el caldo pusimos el rape, puerro, tomate,
perejil, laurel, pimienta en grano

Segundo. Los ingredientes para el arroz (sin contar el caldo) son el bogavante, una sepia, cebolla, pimiento verde, tomate, guisantes, ajos, perejil y el arroz. 

En la foto faltan la cebolla
y el pimiento verde

Aquí están la cebolla y el pimiento

Tercero. Realmente es ahora cuando se empieza a cocinar. Lo primero que haremos será cortar el bogavante y freírlo en la misma olla en la que haremos el arroz. Una vez sofrito, lo sacaremos y lo reservaremos. Seguidamente en ese aceite sofreiremos la cebolla y el pimiento verde.

A la izquierda el bogavante antes de cortarlo. A la derecha, cortado y en el fuego. Bajo, reservado para añadirlo después con todos los ingredientes.

Cuarto. Ponemos a sofreir la cebolla y el pimiento cortados en trozos pequeños. Cuando han pochado añadimos la sepia también cortada.

 A la izquierda el sofrito de verduras, a la derecha la sepia cortada y bajo la sepia ya con las verduras "pochadas"

Quinto. Cuando todo esté en su punto añadiremos el tomate y los guisantes. Mientras todo está al fuego, prepararemos una picada de perejil ajo y un poco del caldo de rape. Esta picada la añadiremos también al tomate antes de echar el caldo.

Los guisantes no se ven, pero están

La picada es opcional, pero
 da más sabor al plato

Sexto. Cuando todo ha "conjuntado" ponemos el caldo y cuando arranca a hervir añadimos el bogavante. Después de unos minutos hirviendo ponemos el arroz. Cuando esté en su punto, o un poco antes, apagamos el fuego, y a comer. 

Acabamos de añadir el caldo

Listo para poner el arroz (aunque no se vea, está hirviendo)

No hay foto del resultado final por que si nos "encantamos" nos dejan sin plato. A que es fácil. Tal vez lo más complicado será para los novatos el cortar el bogavante, pero siempre podéis buscar ayuda. Lo dicho, magnífico resultado para lo fácil que es de elaborar.

Hasta la próxima.