No voy a coger la escobilla del water. Así de claro os lo digo. "Cocina para novatos" entiende que en muchos locales ya se están pasando. Y esto os lo digo porque ayer fui a un local de comida rápida. Evidentemente ya sabía con lo que me iba a encontrar pero todo tiene un límite.
Aceptamos que tengamos que pedir en el mostrador, que tengamos que "limpiar" la mesa, que luego nos llamen por megafonía (imagínate que te llamas Paco Jhones, o Débora Melo, vaya vergüenza), que tengamos que levantarnos a servirnos la bebida, que volvamos al mostrador a pedir ketxhup, que tengamos que recoger la mesa, tirar la basura,... pero lo último es que nos tengamos que enfrentar a una máquina para hacer el pedido. O sea, que ahora directamente entramos y vamos a la máquina-cajero, marcamos la comida que nos apetezca, pagamos con la tarjeta y a esperar a que nos llamen. Todo por ahorrarse unos "jornales". ¿Cómo no ha de haber cada vez más paro?.
Si las cosas siguen así lo próximo será que cuando vayamos al servicio nos den una escobilla y unos trapos para limpiar, es que "ahorrando costes de personal se puede ofrecer el producto a unos precios más competitivos". MENTIRA. Y si no os lo creéis mirad lo que ha pasado con las gasolineras. Primero "quitaron" a los trabajadores que te ponían el combustible y te cobraban. De un día para otro te encuentras que primero debes pasar por caja y después ponerte tú mismo la gasolina. Pero es que ahora, para "ahorrar" costes, es decir para no pagar "jornales", estos trabajadores de las cajas también van a desaparecer, serán sustituidos todos por máquinas. Y yo pregunto ¿es la gasolina ahora más barata?. La misma respuesta la podéis trasladar al mundo de la comida rápida.
Como somos buena gente y tragamos con todo, ya encontramos hasta normal las máquinas expendedoras de bocadillos, franckfurts, hamburguesas, patatas.... que tanto están proliferando en todas las ciudades. Para "Cocina para novatos" este es el límite. Hasta aquí hemos llegado. Ir a comer a un restaurante, a un bar, o incluso a una hamburguesería tipo McDonalds supone exigir unos mínimos de calidad, tanto en la comida como en el servicio. Y no se hable más.
Bueno, tranquilicémonos, y para ello nada mejor que preparar unos tacos de carne de cerdo con tomate que están de muerte. Primero los ingredientes: Tacos de magro de cerdo, cebolla, ajos tomate, pimiento verde, vino blanco y orégano.
¿Os suenan? Siempre es lo mismo |
Primero: Sofreímos la carne. Un ratito y reservamos. Que no esté cruda, pero poco más, luego ya se acabará de hacer con las verduras.
Segundo: En el aceite en que hemos frito la carne, ponemos la cebolla, el ajo y el pimiento. Lo tapamos, y esperamos tranquilamente.
Tercero: Cuando veamos que ya está casi hecha, no hecha, añadimos el tomate, orégano y un buen chorro de vino blanco. Ya sabéis del barato, que no pasa nada.
Cuarto: Volvemos a poner la carne en la cazuela y dejamos que todo junto se haba durante unos, más o menos, veinte minutos.
Es la típica comida que debéis acompañar con una barra de pan. Si la carne es buena, o mejor dicho, no es mala, debe quedar super-tierna. Novatos, podéis hacerlo, ya habéis visto que es muy fácil. Y si no os aclaráis, ya sabéis, acercaros al burguer cercano.
Hasta la próxima.
Segundo: En el aceite en que hemos frito la carne, ponemos la cebolla, el ajo y el pimiento. Lo tapamos, y esperamos tranquilamente.
Tercero: Cuando veamos que ya está casi hecha, no hecha, añadimos el tomate, orégano y un buen chorro de vino blanco. Ya sabéis del barato, que no pasa nada.
Todo a ojímetro, sin pasarnos, pero sin quedarnos cortos |
El vino es opcional, pero da más sabor |
Cuarto: Volvemos a poner la carne en la cazuela y dejamos que todo junto se haba durante unos, más o menos, veinte minutos.
Tapar y esperar a que el fuego acabe el trabajo |
Os debe haber quedado algo así |
Es la típica comida que debéis acompañar con una barra de pan. Si la carne es buena, o mejor dicho, no es mala, debe quedar super-tierna. Novatos, podéis hacerlo, ya habéis visto que es muy fácil. Y si no os aclaráis, ya sabéis, acercaros al burguer cercano.
Hasta la próxima.
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